Placer

¡BUENOS DÍAS RATONCILLOS!

Antes de nada quiero agradecer vuestra implicación en este proyecto. El mes de julio casi está llegando a su fin y con él llega la emoción número 35. Así suena. ¿Qué os inspira? 

Como siempre, espero vuestros comentarios o correos. Recordad, no importa si no acertáis, se trata de aprender y descubrir nuevas emociones en vosotros y en los demás. ¡Ánimo!

Un beso enorme.

·Irene (hermana de Rocío): "Creo que es la felicidad porque los ratones están contentos  jugando juntos".
·Alejandro Moreno: "La nueva emoción yo creo que es diversión, la música es alegre y divertida y los tres amigos se lo están pasando muy bien jugando a esos juegos".
·Adrián: "Felicidad porque los cuatro ratones estaban jugando".
·Iván: "Yo creo que es inspiración porque cada oso está inspirado en cosas diferentes".
·Alejandro Sánchez: "Yo creo que es diversión porque los castores están jugando juntos con las bellotas y están felices.

Esta emoción es el placer. ¿Sabéis en qué consiste?

Nos dice el Emocionario que el placer "es la satisfacción y alegría producidas por algo que nos gusta mucho. Puedes hallar placer en actividades muy diferentes: al fantasear con otros mundos, al mirar cosas bonitas, al resolver problemas difíciles, al sentirse amado..."

¿Cómo apreciar el placer?

Concéntrate. Eso es lo que nos dice el Emocionario. "Para sentir el placer tienes que concentrarte". Es necesario disfrutar de esos pequeños placeres que nos ofrece la vida. Por eso, ante algo que te guste mucho, no lo hagas con prisa, disfrútalo y "saborea" el placer que te proporciona. Por ejemplo, ¿recordáis cuando nos tomábamos los bizcochos en clase? Deseábamos llevarnos a la boca nuestro trozo, pero no empezábamos hasta que todos los compañeros tuviesen el suyo. Al hacerlo, todos sentíamos el placer de saborear un delicioso manjar hecho por vosotros. 

¿En qué otro momento habéis sentido placer?

Fichas de actividades

Solución

"El hombre es un auriga que conduce un carro tirado por dos briosos caballos: el placer y el deber. El arte del auriga consiste en templar la fogosidad del corcel negro (placer) y acompasarlo con el blanco (deber) para correr sin perder el equilibrio".

Platón